nunca, nunca, nunca des consejos...
me lo repito como un mantra para no hablar de mas...
aunque te los pidan no des consejos...
porque de sobra sabemos que los consejos dados nos pueden ser reprochados...
y que un día sin darnos cuenta pasaremos de confidente a testigo incómodo...
pero hay cosas que no podemos remediar... ni aún sabiendolas...